El papel de las ciudades y su adaptación al cambio Climático a debate en Sevilla.
El Grupo Español para el Crecimiento Verde (GECV), de la mano de su presidente, Valentín Alfaya, participó el pasado 29 de noviembre en la Jornada “Pacto de los Alcaldes para el Clima y la Energía. Ciudades y Cambio Global”. Cerca de 200 representantes municipales de toda España se dieron cita en Sevilla para abordar el papel de las ciudades y su adaptación al cambio climático. Durante el evento, se analizó de qué manera los efectos del cambio global están afectando a las urbes y cómo los territorios se están adaptando a las transformaciones. Los asistentes analizaron cómo este fenómeno está moviendo a la población mundial, así como la respuesta de las ciudades a la globalización y cómo afecta el desarrollo tecnológico o cuáles serán los servicios del futuro, entre otros temas.
El presidente del GECV defendió en su discurso el papel del sector privado frente al reto del urbanismo sostenible. Tras la presentación del Grupo que preside y explicar su principal objetivo, “el de fomentar la colaboración público-privada y avanzar conjuntamente para abordar los retos ambientales”, alertó de que, en 2050 habrá más personas viviendo en ciudades que las que hubo en todo el planeta a principios de siglo. Según indicó, consumirán más del 75% de la energía. “Las ciudades cada vez son más grandes y más vulnerables, expuestas a eventos meteorológicos y otros fenómenos relacionados con el cambio climático”, agregó.
Valentín Alfaya afirmó que “la resiliencia será la principal variable de la sostenibilidad urbana”, por lo que apeló a una actuación urgente, “cada euro que no invirtamos ahora, costará más de 4,3”, añadió. El representante del GECV destacó el papel del sector privado, “un agente indispensable para abordar los retos que tenemos por delante”, añadió. Además señaló la necesidad de certidumbre, de señales de precio, de marcos de colaboración de largo plazo, de acuerdos orientados al servicio público y de “situar al ciudadano en el centro de todas las cosas”.
En cuanto a las formas de reorientar el sector de la edificación en nuestro país, habló de la posibilidad de renovación del parque de edificios existente e hizo hincapié en los retos a los que, en su opinión, tiene que dar respuesta el nuevo sector de la vivienda en España. Proveer a los residentes de servicios de viviendas adecuadas de buena calidad y accesibles, alcanzar ese objetivo con una fuerte reducción de la huella ecológica del país y generar una actividad económica viable y capaz de generar puestos de trabajo son objetivos también marcados en el marco del medio (2020-30) y largo (2050) plazo y en el marco mundial regional (UE).
Aquí es donde el Grupo de Trabajo sobre Rehabilitación (GTR) al que pertenece, puede jugar un importante papel, según defendió, ya que su objetivo no es otro que “el de promover el sector de la edificación basado en la construcción de nueva edificación hacia objetivos de creación y mantenimiento de la habitabilidad socialmente necesaria, así como la creación de un nuevo sector de la vivienda económicamente viable que garantice el derecho a la vivienda”, entre otros aspectos.
El encuentro, organizado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, permitió el intercambio de experiencias entre las distintas administraciones sobre buenas prácticas en materia de sostenibilidad y sobre la transformación de las ciudades ante el cambio global. El Pacto de los Alcaldes, promovido por la Unión Europea y coordinado en Andalucía por la Junta y las diputaciones provinciales, nació para reducir voluntariamente las emisiones de CO2 en al menos un 20 por ciento en los municipios adheridos. A finales de 2015, esta iniciativa inició una nueva etapa pasando a denominarse Pacto de los Alcaldes por el Clima y la Energía, ampliando además la meta de la reducción de las emisiones de C02 hasta 2023 en un 40 por ciento. En definitiva, se pretende reforzar sus objetivos a través de la inclusión de estrategias frente al cambio climático tales como la mitigación, la adaptación o la capacidad de resiliencia de las ciudades ante situaciones adversas.
