El pasado 28 de noviembre, el vicepresidente del Grupo Español para el Crecimiento Verde, Gonzalo Sáenz de Miera, moderó la mesa redonda: “¿Cómo pueden los usuarios industriales españoles beneficiarse de Copernicus para contribuir al crecimiento verde?”. El debate tuvo lugar en el marco del taller titulado: “Copernicus para el Crecimiento Verde y las Ciudades Inteligentes”, celebrado en Madrid. La jornada sirvió de espacio para debatir sobre las soluciones a nivel europeo para hacer frente al cambio climático a partir de la concepción de un nuevo modelo de ciudad.
Copernicus es considerado el programa más ambicioso de observación de la Tierra de la Unión Europea en colaboración con la Agencia Espacial Europea para proporcionar información precisa, actualizada y de libre acceso a todos aquellos que estén interesados, ya sean empresas u organismos públicos, para mejorar la gestión del medio ambiente, comprender y mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad ciudadana.
El Grupo Español para el Crecimiento Verde puso el acento en las ventajas de la herramienta para el sector empresarial y destacó “el valor añadido derivado para evitar duplicidades, contrastar información, automatizar procesos, optimización y eficiencia de uso de recursos, máximo retorno de la inversión” entre otros. El GECV advirtió de que se trata de una iniciativa muy potente y una revolución en la provisión de información, pero todavía “es un gran desconocido para las empresas. En general no son conscientes del enorme potencial de la información que rescata, tanto para uso interno como para el desarrollo de nuevos productos comerciales o de servicio para sus clientes”.
Entre las barreras que se destacaron, la complejidad de interpretar y adaptar los datos a las necesidades de la empresa, la falta de personal formado en gestión de datos (big data) o el hecho de que los operadores tecnológicos vayan más deprisa que los usuarios finales de la información.
Los ponentes destacaron algunos ejemplos prácticos para dar las claves de cómo sacar el máximo partido a la información que proporciona. Indra y GMV como empresas tecnológicas, son proveedores de Copérnico y participan en varios proyectos de investigación financiados por la UE sobre el programa. Desarrollan aplicaciones informáticas y programas piloto con soluciones para la gestión de las ciudades y la energía. En concreto, se puso de relieve la aplicación de Indra llamada: Transactive Energy Advanced Manager, que permite sacar el máximo rendimiento a la instalación de paneles solares, combinando información extraída del servicio atmósfera de Copernicus sobre radiación solar con datos y necesidades de consumo.
Telefónica, por su parte, miembro del G.E.C.V. , desde su unidad de Big Data for Social Good (LUCA) se lanzan proyectos que buscan un impacto social y se utilizan datos de movilidad propios de la empresa combinados con Open Data y datos de fuentes como COPERNICUS. Una de las líneas de trabajo aborda el problema de la calidad del aire en las ciudades, analizando los datos de movilidad de telefónica con los de concentración de contaminantes debida a la circulación de vehículos a fin de establecer un modelo que permita predecir y trabajar con estos parámetros. Para generar este modelo, hay que combinar muchas variables y los datos COPERNICUS (satélites, clima, dispersión atmosférica, etc.) son claves. En cuanto a Ferrovial, miembro del Grupo Español para el Crecimiento Verde, subrayó el potencial que ve en estos datos para mejorar la gestión que hacen de los servicios urbanos
El reto para el Grupo es “conseguir sacarle el máximo provecho a esta información, que permita tomar mejores decisiones que contribuyan a un futuro más sostenible”. Para ello, los participantes consideraron importante organizar más encuentros y talleres de este tipo, orientados al sector empresarial. El GECV ya está trabajando en la organización de un encuentro que permita acercar el proyecto a las empresas españolas.
